viernes, 29 de abril de 2016

RESEÑA: La Colmena.

LA COLMENA


Título: La Colmena.

Autor: Camilo José Cela (Padrón, A Coruña 1916 - Madrid 2002) autor español muy prolifero en sus facetas como novelista, periodista, ensayista, editor de revistas literarias, fundador de editoriales (Alfaguara), conferenciante...Fue miembro de la Real Academia Española durante 45 años y senador en las primeras Cortes generales de la transición democrática. de carácter peculiar y con grandes dotes para la oratoria, Camilo José Cela fue galardonado, entre otros, con premios como el Príncipe de Asturias de las Letras en 1987 el Cervantes del año 1995 y el Nobel de Literatura en el año 1989. Entre sus obras más representativas encontramos La Família de Pascual Duarte, La Colmena, San Camilo o Viaje a la Alcarria entre otros muchos. 


Editorial: Alianza Editorial. 

Idioma: castellano. 

Sinopsis: publicada en Buenos Aires a causa de la censura, La Colmena irrumpió en 1951 en la anodina escena literaria española de la época, introduciendo en ella una decidida corriente de crítica y renovación. Como el propio autor afirma en una pequeña nota en la primera edición, esta novela "no es otra cosa que un trozo de vida narrado, paso a paso, sin reticencias, sin extrañas tragedias, sin caridad, como la vida discurre". Ambientada en Madrid en unos pocos días del mes de diciembre de 1943, la obra refleja la realidad intrahistórica de aquellos días de incertidumbre de la posguerra a través de unos personajes inmersos en una insignificancia que, llevada al extremo de la revelación, se erige uno de los elementos más poderosos de la novela. 

Su lectura me ha parecido: densa, amplia, social, brusca, directa, coral, espontánea, profunda, crítica, reflexiva, intensa, impactante, representativa, necesaria...Queridos lectores y lectoras, hoy, como podréis comprobar, este espacio destinado al debate y la opinión, nos adentramos en uno de esos libros importantes, que de seguro habréis oído hablar, que estudiamos en su momento en la asignatura de lengua castellana, que aparece y reaparece en nuestras vidas sin a penas percatarnos y que algunos incluso os habréis adentrado en él porque en el instituto os lo mandaron leer. Todo esto que os comento, pero sobretodo, teniendo en cuenta el poder de la globalización en la que estamos inmersos, he llegado a la conclusión de que muchas veces, más de las que imagináis, nos percatamos de que conocemos, en lo que respecta a literatura, más a autores y novelas procedentes del extranjero que lo que tenemos en nuestra propia casa. Actualmente, en España, estamos inmersos en las conmemoraciones del cuarto centenario de la muerte de Miguel de Cervantes, algo que no se puede reprochar y que debe hacerse, por el bien de revitalizar una cultura española cada vez más empobrecida. Sin embargo, parece que sea Miguel de Cervantes el único autor del que, como españoles, debemos sentirnos orgullosos, en este sentido, discrepo totalmente. Calderón, Lope de Vega, José Ortega y Gasset, Benito Pérez Galdós, José Zorrilla, Gustavo Adolfo Bécquer, Federico García Lorca, Jorge Manrrique, Rafael Alberti, Miguel Hernández, Rosalía de Castro, Emilia Pardo Bazán, Carmen Laforet, Fernando de Rojas....La lista es interminable, como de interminable es nuestra cultura, la cual, deberíamos valorar y conocer mejor. El autor del libro que hoy tengo en mis manos pertenece a esta ilustre lista, y como tal, en Jimena de la Almena, teníamos la obligación de reseñar su obra cumbre, La Colmena: una novela amarga escrita en una época todavía más amarga. 


La historia de cómo La Colmena llegó a mis manos es sencilla, sin embargo, para contarlo bien, debemos remontarnos unos años atrás, hasta prácticamente mi etapa estudiantil. Como ya apuntaba en la introducción, muchos seguramente tuvieron que leerse La Colmena por obligación del profesor/a de lengua castellana en el instituto, la verdad, no fue ese mi caso, aunque si el de algún compañero de clase, es más, para seros sincera y aunque me duela decirlo, trataba de evitar a toda costa leer ese libro. No se exactamente lo que me llevó a evitar leer La Colmena, seguramente en la mente de una chica de 15-16 años, teniendo ante si las novedades de la literatura juvenil, no cabrían historias como la que se narra en este libro que hoy reseñamos. Años más tarde, ya cursando los estudios universitarios, me animé con su lectura, y la verdad, fue un acto totalmente inesperado, pues, no tenía en mente aquella tarde llevarme prestado de la biblioteca éste libro. Recuerdo que era una edición barata, de esas que de vez en cuando regala el periódico de turno y cuyo tamaño de letra disuadía a cualquiera. El resultado de aquel primer intento fracasó estrepitosamente, y no volví a pensar en La Colmena hasta que, colaborando ya con el Grupo Anaya, lo vi entre sus novedades. Por aquel entonces ya tenía una vision de la historia un poco más amplia y anímicamente sobretodo, me encontraba preparada para afrontar una lectura de estas características. Así que en cuanto tuve la oportunidad le pedí el libro a la editorial, y desde entonces, hasta ahora, se ha convertido en uno de mis imprescindibles.

Centrándonos en este párrafo en la crítica propiamente dicha, mencionaremos en primer lugar que La Colmena es una lectura densa, pero no excesivamente complicada si uno conoce más o menos la trama. A decir verdad, desde aquí recomiendo a todo aquel que quiera leerselo, que espero que seáis muchos de vosotros, que lo hagáis despacio, sin prisa. La Colmena es una lectura con muchos detalles, personajes y aspectos que merecen una atención extra del lector, la cual, en este caso es absolutamente necesaria. Por otro lado, hay que señalar en relación con la anterior que, en general, La Colmena presenta un tono y una narración directa, con golpes de efecto, cortante, lo cual puede resultar algo brusco a veces, sin embargo, de pronto, te encuentras con una literatura interesante, apasionada y lírica en cierto sentido. Es como si el escritor se moviese entre dos técnicas diferentes que en un principio podrían chocar, pero que magistralmente no lo hacen, lo que le da más valor si cabe al trabajo efectuado en la novela. Seguidamente, comentar que me ha encantado, es más, me ha impactado ese amplísimo abanico de personajes que el autor construye, cada uno con sus especificidades y características propias, únicos y diferentes entre ellos. Sin embargo, lo que más me ha impactado ha sido ese nexo de unión que aglutina a todos los personajes y que más adelante, en la reflexión abordaremos, creando dentro de él, de este nexo, pequeños pequeños universos  en los que los personajes parecen escapar de las preocupaciones y de las dificultades del día a día. A mi en especial, me ha gustado mucho el grupo de intelectuales tertulianos que se reúnen en el café de Doña Rosa, para competir entre ellos con sus escritos, debatir sobre literatura y en el fondo, sobre la época que les ha tocado vivir. Como apunte final, resaltaré el hecho de que las descripciones que el autor ofrece no se hacen pesadas, al contrario, nos sirve a nosotros como lectores para apreciar el momento en el que esta magnífica obra fue escrita.


Seguramente, muchos de vosotros ya sabréis o habréis adivinado por donde van los tiros en lo que respecta la reflexión. Al respecto tengo que decir que a pesar de que la haya ido sugiriendo a lo largo de la reseña, lo cual he hecho muy pocas veces, creo que es, como todas las que proponemos en este espacio, necesaria siempre. Hablaremos, por tanto, en este tercer párrafo de ese nexo que antes señalaba, ese punto de unión de los muchos personajes que aparecen en la novela, y es que éste, es tan cohesionador que es imposible no dejar de pensar en ello una vez has finalizado la lectura de La Colmena. Esta realidad común es, para desgracia o fortuna de los protagonistas, la posguerra y todo lo que ello conlleva, unos la viven en la más absoluta de las pobrezas, otros la viven como pueden bajo el manto de la represión y la escasez de alimentos, unos la afrontan con cierto optimismo y otros se aprovechan de la situación para enriquecerse a costa de la desgracia ajena. Éste mundo de contrastes y de miserias humanas es la realidad de los personajes de la novela, la cruda realidad, pero también fue la realidad de toda una generación que se hace mayor, tiene nietos y afronta el irremediable ocaso de la vida. Hablamos de la generación de nuestros abuelos y abuelas, los cuales, tuvieron que soportar desde pequeños, en muchos casos, las penurias de la posguerra y el fuerte peso de una dictadura que empezaba a dar sus primeros pasos, los cuales, fueron los más duros y contundentes. Por todo ello, y desde mi más humilde opinión, la de una historiadora, os aconsejo, a vosotros, jóvenes, vosotros, que os pasáis horas frente al teléfono móvil, que os atreváis a preguntar, a hablar y a escuchar a estas personas, a vuestros abuelos y abuelas, los cuales, de seguro que estarán deseosos de contaros sus experiencias, en su mayoría duras, las experiencias que sin duda forjaron su carácter y su forma de pensar. Con esto, queridos lectores y lectoras, no sólo conoceremos mejor una época, sino que contribuiremos a que éstas enseñanzas y vivencias no se queden en el olvido, pues el pasado es importante, no sólo para el oficio de historiador, también para todo aquel con un mínimo de inteligencia y de sentido común, algo que por cierto, escasea en ciertas élites gobernantes de nuestro país. La Colmena: una historia de amistad, supervivencia, solidaridad, miseria, optimismo, oscuridad, pesimismo, realidad...Una novela que no debe pasar desapercibida, por el bien de la historia y la cultura en este país.

Frases o párrafos favoritos: 

"Los clientes de los cafés son gente que creen que las cosas pasan porque si, que no merece la pena poner remedio."

"La cultura y la tradición no son ideológicas, siempre son instintivas."

Película/Canción: en el año 1982 se estrenó la gloriosa adaptación de La Colmena, dirigida por Mario Camus e interpretada por un elenco de actores españoles irrepetible: Victoria Abril, Francisco Algora, Ana Belén, Rafael Alonso, José Luís López Vázquez, José Sacristán, Emilio Gutiérrez Caba, Concha Velásco, Francisco Rabal, Charo López, Maria Luisa Ponte, Imanol Arias o Mary Carrillo entre otros. La película hoy por hoy se considera un clásico del cine español, la cual, llegó a merecer el Oso de oro en el Festival de Berlín. En ella además, podemos disfrutar de la interpretación y cameo del propio Camilo José Cela entre los tertulianos.




¡Un saludo y a seguir leyendo!

Cortesía de Alianza Editorial  (Grupo Anaya) 

lunes, 25 de abril de 2016

RESEÑA: Viajo Sola.

VIAJO SOLA


Título: Viajo Sola. 

Autor: Samuel Bjork, (Trondheim, Noruega 1969) es el seudónimo del noruego Frode Sander Oien. Es novelista, autor de obras de teatro, cantante, ha expuesto en varias galerias de arte y a traducido a Shakespeare. Hasta el momento ha publicado dos novelas: Pepsi Love (2001) y Speed for Breakfast (2009). Vive y trabaja en Oslo. Esta es su tercera novela, éxito de ventas en varios países donde ya se ha publicado.


Editorial: Suma de Letras.

Idioma: noruego.

Traductor: Martin Simonson.

Sinopsis: un hombre sale a pasear con su perro para recuperarse de la resaca y de su cargo de conciencia. De repente el perro sale corriendo entre los árboles. Allí el hombre descubre a una niña que cuelga de un árbol, balanceándose sobre el suelo. Con una mochila escolar en la espalda y un cartel alrededor del cuello que dice: "Viajo sola". El inspector de policía Holger Munch se encarga del caso y no tarda en darse cuenta de que va a necesitar la ayuda de su excolega Mia Krüger. Sin embargo, Mia, que siempre había sido una chica sana, ahora parece estar enferma, realmente enferma. Holger Munch acude a su casa para pedirle que vuelve al servicio activo. No tienen ni la más remota idea de lo que les espera.

Su lectura me ha parecido: intensa, brutal, oscura, penetrante, adictiva, persistente, constante, creciente, abrumadora, chocante, bien estructurada...Queridos lectores y lectoras, como muchos de los que os pasáis muy a menudo por este espacio sabréis, una servidora, desde hace unos años, es una gran aficionada a la novela policíaca, o al género negro como ahora se le etiqueta. Me inicié con las novelas de Camilla Läckberg, y de ahí di el salto a otros autores como Agatha Christie o Petros Markáris entre otros. Sin embargo, os confesaré que desde el último libro de Camilla Läckberg que me leí hace unos cuantos meses, no me he atrevido de nuevo a leer una novela policíaca, negra o como quiera etiquetársele, que provenga de la tradición escandinava o del norte de Europa. Esto, tiene una explicación muy fácil y precisa, pues, bajo mi más sincera opinión, creo que el boom que en su momento produjeron estas novelas en el pasado literario más reciente se está desinflando poco a poco, dando paso a una novela policíaca más social, más mediterránea y con menos escenas "gores" por decirlo de alguna forma. De hecho, el libro que hoy os presento, aunque de seguro que la gran mayoría lo habrá leído o al menos visto en las librerías, a mi parecer, representa a una nueva generación de autores nórdicos cuyo estilo es similar al de sus predecesores pero en el que ya empieza a verse esa decadencia yéndose a la trama más morbosa, y hacer de ella, una historia excesivamente impactante. Sin más preámbulos, os presento a Viajo Sola: el thriller llevado ligeramente al extremo.

La historia de como Viajo Sola acabó ocupando el primer estante de la estimada biblioteca particular es realmente sencilla. Este ejemplar que hoy tengo de nuevo a mi lado mientras redacto estas líneas me lo regalaron en un cumpleaños si no recuerdo mal, o fue tal vez por mi santo, no me acuerdo, el caso es que junto con Alicia en el País de las Marvillas de Carroll y Las Uvas de la Ira de Steinbeck éste libro estaba entre los presentes. Sin embargo, antes de que ésto aconteciese, una servidora ya le había echado el ojo en más de una ocasión cuando salió a la venta en España el año pasado. Recuerdo que su inquietante y explicita portada presidía los escaparates más importantes y visibles de las mejores librerías de la ciudad, y que, como era de esperar, se convirtió en todo un fenómeno editorial, copando reseñas procedentes de otros blogs y siendo el protagonista absoluto de concursos multitudinarios que por aquel entonces se celebraron. No obstante, y contra todo pronóstico, tardé un tiempo en atreverme a leer el libro, había leído tantas criticas buenas y el respeto que me producía y me sigue produciendo la portada contribuyeron a que las expectativas con respecto a su lectura fueran muy altas, tal vez demasiado. Cuando por fin inicié su lectura, pero sobretodo, cuando a los pocos días finalicé su lectura estuve segura de dos cosas: la primera, que Viajo Sola había resultado ser la novela adictiva que me esperaba, sin embargo, la segunda fue que las tremendas expectativas que me creé se vinieron paulatinamente abajo en cuanto comprobé que me hallaba ante una lectura excesiva, lo que justificaba esa adicción que te acompaña de principio a fin.

Centrándonos en este punto en abordar la crítica a la novela, comenzaremos diciendo que Viajo Sola presenta un estilo ágil, trepidante, rápido, el cual te lleva a veces casi al límite, haciendo que, de esta forma su lectura enganche, hasta tal punto de que no puedas despegar los ojos de sus páginas. Este es un mérito enorme y hay que reconocérselo, Viajo Sola me tuvo en vilo durante el tiempo que duró su lectura, algo que tratándose de una novela de estas características era de esperar. sin embargo, al terminarlo me di cuenta que ésto se debía, entre otras cosas, a que la trama giraba entorno a lo morboso de las investigaciones policiales, no sólo en lo que respecta al crimen en si (el cual ya es bastante fuerte), sino también al respectivo pasado de los protagonistas principales, de Holger y de Mia. El excesivo recreamiento del crimen perpetrado a una pobre menor y esa obsesiva necesidad de desentrañar el por que de la situación que viven los personajes, hacía atrayente la lectura, sin embargo, al finalizar su lectura te percatas que no ha habido belleza en su literatura, sino que el tono seco, directo y evocador en lo terrible pisaban el acelerador con fuerza, por lo que la rapidez de una lectura vacía se hacía inevitable No nos encontramos por otro lado, ante una novela sutil, para nada, sino que ésta, acompañada de los giros inesperados que siempre son habituales, se mueve entre el vaivén de una trama clasicamente nórdica en sus formas y notablemente impactante en cuanto a presentación del conflicto. Sin embargo, conforme alcanzas la mitad más o menos del libro, ésta última va adquiriendo cada vez más peso, hasta convertirse, a medida que se va descubriendo el pastel, en algo oscuro, perverso, truculento, que llega hasta resultar ligeramente gore. En resumidas cuentas, pasa de la clásica novela nórdica a un abrupto, narcótico y demasiado precipitado desenlace. Con todo esto no quiero decir que no sea una buena novela, en conjunto, el libro es bueno, no obstante, ese cambio de ritmo y el oscurantismo excesivo de la trama juegan en ocasiones una mala pasada, corriendo el riesgo de convertirse en una novela de exagerado y rebuscado argumento. Seguidamente, y he aquí algo positivo, me resultó muy buena la habilidad con la que Bjork describe los paisajes del mal, esos escenarios en los que parecen suceder cosas extrañas, incluso estando los propios policías involucrados en ellos, de hecho, es un poco como el paisaje no sólo de la Noruega natal del autor, también de todo ese norte Europeo, cuyos parajes producen admiración a la vez que escalofríos. En resumidas cuentas, Viajo Sola se ha convertido como era de esperar en una de esas lecturas que recuerdas de vez en cuando con un ligero escalofrío, lo cual es un buen síntoma, sin embargo, considero que existen, sobretodo en la tradición nórdica, mejores novelas negras.


En este último párrafo, destinado a la crítica y la reflexión, creo en esta ocasión, lectores y lectoras, sobretodo teniendo en cuenta que hoy reseñamos Viajo Sola, que nos paremos a pensar en una cuestión en la que muy pocoas veces le damos importancia y que trasciende o no, depende del caso, de la propia trama narrativa. Por primera vez en la historia de este espacio, mi reflexión no parte ni de la historia, ni de los personajes, ni de la psicología, ni siquiera de los dilemas morales o los grandes temas de la literatura, no, en esta ocasión, dejarme, amigos y amigas, que hablemos de portadas. Si, de portadas, habéis leído bien, esa cara A del libro, que sirve como carta de presentación y cuya principal función es atraer nuestra mirada para finalmente lograr (apoyándose a su vez en una buena sinopsis) que lo adquiramos en cualquier librería o biblioteca del mundo. Muchas veces, paseando entre los blogs de literatura, veo como algunos de ellos, dedican entradas especiales a este tema, resaltando esas portadas que más les han llamado la atención por X motivo o las peores, dando sus razones de porque son o no son una buena portada. Si queréis saber mi opinión, os diré que en este aspecto soy bastante práctica, además, apelo a la experiencia, y es que, una buena portada es el márqueting perfecto para que no sólo se compre un libro, sino para que también se recuerde. ¿Quién no recuerda las portadas de la saga Harry Potter, las de los Juegos del Hambre, las de Divergente o aquella de Crepúsculo de la manzana sostenida entre dos pálidas manos? En el terreno de la novela juvenil es mucho más fácil, pero en el terreno de los clásicos también sucede, por ejemplo, con títulos tan icónicos como Lolita, La Metamorfosis, Frankenstein o El Quijote. Las hay más elaboradas, más sutiles, más conceptuales, más abstractas, más explícitas, más naturales, más oscuras, más brillantes más irreverentes, más polémicas, e incluso las hay que, como es el caso de Viajo Sola, no sólo te produce escalofrío observarla, sino que además no te libras de un tremendo spoiler. En definitiva, una portada es a fin de cuentas, un ejercicio de sugestión intenso, elaborado por el ilustrador/a cuyo trabajo muy pocas veces es reconocido a pesar de la gran importancia que juega en la cadena que une a las editoriales con el lector. Viajo Sola: una historia de terror, investigación, crimen, pasado, heridas, paisajes nórdicos, drogas, acción, morbo...Una historia que recomiendo, aún así, a todos los amantes del género.

Frases o párrafos favoritos: 

"Las pastillas que se había tomado la noche anterior todavía estaban haciendo efecto. Creaban adicción, ralentizaban el raciocinio, anestesiaban los sentidos. "No se deben tomar con alcohol". ¿A quién le importaba? En todo caso,sólo faltaban doce días para morir. Las cruces del el calendario en en la cocina lo mostraban: quedaban doce cuadrados sin tachar. "Doce días. El 18 de abril."

Película/Canción: a la espera de que se adapte a la gran o pequeña pantalla Viajo Sola, os dejo con una pieza que podría casar muy bien con la trama de la novela:


¡Un saludo y a seguir leyendo!

sábado, 23 de abril de 2016

23 DE ABRIL: DÍA DEL LIBRO

FELIZ DÍA DEL LIBRO LECTORES/AS

¡Hola queridos lectores/as! Desde Jimena de la Almena os deseo un FELIZ DÍA DEL LIBRO a todos y a todas, y que hagáis acopio de buena literatura estos días con las fantásticas Ferias de Libros que ahora se celebran en cada rincón. Por mi parte seguiré al pie del cañón, tratando de ofrecer opinión y debate a través de este espacio literario. 

¡Un saludo y a seguir leyendo!

martes, 19 de abril de 2016

RESEÑA: No es tan fácil morir.

NO ES TAN FÁCIL MORIR

Título: No es tan fácil morir. 

Autor: David Sáez Ruiz (Teruel 1973). Natural de Albarracín, donde reside actualmente, ejerció la psicología clínica durante diez años en su consulta privada de Teruel. Actualmente se dedica a la escritura y a la docencia en el Centro asociado de la UNED en Teruel, donde imparte varias asiganturas del grado de psicología. En el año 2000 publicó el libro La Psicología al alcance de los padres. Entre sus novelas, todas ellas publicadas en Éride Ediciones, destacan No es tan fácil MorirMe llamo Pánfilo, El primer Otoño y Pídeme un deseo, incluida en la colección La mirada de los hombres en la novela erótica, de Éride Ediciones. 


Editorial: Éride. 

Idioma: castellano. 

Sinopsis: la historia de Caridad es un delirio parecido a la vida, un paseo por los límites de la cordura, la memoria y el dolor. Un diario privado, el último gran reto de una mente brillante y cansada. El legado de toda una generación de mujeres que vivieron a la sombra del machismo y la tradición interesada. Incapaz de olvidar el pasado, afronta su ingreso en una residencia de la única manera posible: abrazada a la lectura de El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha. De la mano de don Quijote y Sancho, se refugia en un universo de gigantes disfrazados de molinos, vestiglos, sabios encantadores, aldonzas y dulcineas, fantasías descarnadas y realidades fabulosas. 

Su lectura me ha parecido: intensa, divertida, dramática, necesaria, bella, intensa, reflexiva, penetrante, algo densa, triste, dulce y amarga al mismo tiempo...Queridos lectores y lectoras, llevaba mucho tiempo deseando redactar la reseña de este libro, sin embargo, las circunstancias de la vida, es decir, la falta de tiempo y demás idas y venidas de la típica vida de estudiante, hacían que no encontrarse un momento propicio para poder traeros esta historia. No obstante, y ya en las fechas en las que nos encontramos, y a pesar de que me hallo en una vorágine de escritura y entrega de trabajos académicos de gran envergadura, no podía dejar pasar la oportunidad de hablaros de esta novela, y más, teniendo en cuenta el tema y que pronto, tendremos en muchas ciudades de nuestro país esas casetas tan inconfundibles, las cuales, nos anuncian la festividad favorita de todo lector y lectora. Antes de adentrarme en ella, sólo quiero mencionar, como apunte a tener en cuenta, que ésta es hasta la fecha, una de de las lecturas revelación de la temporada, no sólo por la forma de integrar la universalidad con la más rabiosa actualidad, también, porque viene de un autor poco conocido en el mundo literario pero que sin duda, se ha merecido todo mi respeto con esta novela totalmente recomendable y cuyo recuerdo todavía perdura en mi memoria. Sin enrrollarme más de lo necesario, os presento No es tan fácil morir: la vigencia del Quijote en estado puro.


La historia de como esta novela llegó a mis manos es del todo sencilla, de hecho, todavía atesoro en mi memoria dicho recuerdo. Algunos de vosotros de seguro que recodaréis aquella reseña de principios del año pasado titulada El primer Otoño, adquirida durante el verano del año anterior y cuya reseña podéis leer en este espacio, pues, bien, la historia se repitió. El verano pasado, mientras veraneaba en mi pueblo, volví a asistir a la presentación de las novelas de David Sáez Ruiz, pero esta vez, con la sensación de conocer un poco más su personalidad y estilo como escritor. Aquella vez, en lugar de en la pequeña sala de la otra vez, la presentación se realizó en la lonja del ayuntamiento, a las 16.00 de la tarde, y con una calor que disuadía el atreverse a pisar la calle. No obstante, y a pesar de que fueron mucha menos gente que la otra vez, se estaba mucho más tranquilo. Además de volver a presentar sus anteriores novelas, las cuales ya conocía, nos habló de una publicación que aparecería en un recopilatorio sobre novela erótica narrada por hombres que la editorial Éride publicaría prontamente. Una vez finalizó la presentación, salí de allí con un libro bajo el brazo, titulado, No es tan fácil morir, el cual ya iba por la segunda edición, lo cual estaba muy bien. Aquella, fue sin duda, junto a Sumisión de Michel Houellebecq otra de las lecturas que marcó aquel verano. Recuerdo las largas tardes de campo, de reunión delante del televisor o simplemente de sentarse a la "fresca" leyendo esta novela, de hecho, muchas veces le leía pasajes a mi pareja, que con curiosidad, escuchaba mis palabras y la historia que brotaba poco a poco de entre mis labios. Y así fue como, y en honor de la dedicatoria que reza la primera de sus páginas, Caridad, su entrañable y original protagonista, me acompañó en esta intensa aventura, invitando a que en un futuro persiguiera mis quimeras.


Centrándonos en abordar la crítica de No es tan fácil morir, comenzaremos diciendo en primer lugar que esta novela presenta una historia muy marcada cronológicamente, no debemos olvidar que se trata de un diario personal, y que como es de esperar, desprenderá todas las características propias de este estilo, y en ese sentido sinceramente no defrauda para nada. Es más, mientras nos adentremos en sus páginas, no podremos evitar meternos de lleno en la historia que el autor nos quiere contar, en la personalidad de Caridad y en la propia residencia que, aunque sea éste un ambiente que no conozca suficiente el joven lector, te proporciona los mecanismos necesarios para que inevitablemente seas absorbido por ese paisaje en el que parece que se vislumbra el crepúsculo de una vida, pero que también, puede ser un lugar perfecto para no dejar nunca de ser joven. Por otro lado, hay que aplaudir la laboriosa, ingeniosa e interesante construcción del personaje de Caridad, autora del diario y con una personalidad muy peculiar, en la que se entremezcla el el cariño a la familia a pesar de que ésta, no sea la mejor del mundo y cometa terribles errores, la ternura y un sentido del humor extraordinarios, las ganas de aprender, su opinión bastante certera de ciertos temas de actualidad, su elevada cultura y el resentimiento y la rabia por no haber podido realizar sus sueños por culpa de una sociedad en la que las mujeres debían permanecer sumisas al marido. En el personaje de Caridad, en ese sentido, representa a una generación muy concreta, a la de nuestros abuelos y abuelas, un canto a una época en la que las mujeres lo tuvieron muy difícil para poder prosperar. Seguidamente, es importante señalar la gran presencia del Quijote en esta novela, no sólo en el hecho de que cada capítulo, cada entrada del diario, se inicie con unas frases de la célebre novela, también reside en la potencia emocional que trae como consecuencia, sirviendo de mástil al que Caridad se agarra con todas sus fuerzas para ir sobrellevando los días en la residencia lo mejor posible, ahí, en este aspecto, podemos apreciar el magnífico poder de la literatura, que trasciende incluso al terreno de lo terapéutico. Por último, y sólo por nombrar algún aspecto discordante, su ocasional monotonía, sobretodo al rededor de la mitad-final del libro, pero que se arregla con uno de los finales, y no es por hacer spoiler, más inesperados de los que he leído hasta el momento.

Como tradicionalmente llevamos haciendo, en este párrafo plasmaremos las principales reflexiones que nos ha dejado la lectura de un libro, en este caso, le toca el turno a No es tan fácil morir, que, como ya podréis imaginar, la novela en si y el tema que trata esta sujeta a muchas opiniones y productivos debates. No obstante, y teniendo muy en cuenta las fechas en las que próximamente nos hallaremos, me gustaría destinar este párrafo a hablaros de los llamados idealistas. Se que es un tema muy recurrente, sobretodo si ésta reflexión procede de la lectura total o parcial del Quijote, sin embargo, considero de gran importancia tratar el tema. El idealista, como todos muy bien sabéis, es aquel o aquella que lucha por un objetivo, sea cual sera, y no cejará en su empeño por lograrlo, sin importarle nada y a costa de lo que haga falta. No obstante, como algunos os habréis dado cuenta, existen idealistas e idealistas, aquellos que persiguen un objetivo loable y beneficioso, incluso que puede llegar a satisfacer personalmente al individuo en si, pero también existen los idealistas que pretenden lograr un objetivo nada bueno y que incluso puede llegar a unos extremos terribles, tan terribles como los que a lo largo de la historia hemos podido apreciar, ejemplos los hay y de sobra. También, como le sucede a Alonso Quijano, existen en nuestra sociedad idealistas que en su intento por lograr su meta, su quimera, llegan incluso a poner en riesgo su vida o a rebajarse como persona hasta límites insospechados. En No es tan fácil morir, nos encontramos el ejemplo de la anorexia, pero también, podemos verlo en los realities que cada vez más están ocupando un lugar privilegiado en las cadenas de televisión, sea del espectro ideológico que sea. Estamos, queridos lectores y lectoras, ante unos Alonsos Quijanos del siglo XXI a los que el afán de conseguir lucir un cuerpo 10 o la ambición de ser proclamado ganador del último talent show ha tornado en locura su cordura. Por todo ello, lo que pretendo demostrar es que, a pesar de que hayan llovido los siglos, El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha sigue vigente, y novelas como No es tan fácil morir nos recuerdan su legado y las enseñanzas que de él se pueden extraer. No es tan fácil morir: una historia de tristeza, humor, amor, Sanchos, Aldonzas, sueños incumplidos, frustraciones, ternura, abstracción...La mejor muestra de que la inmortalidad literaria es posible.

Párrafos o frases favoritas:

"Un buen libro se reconoce porque en su relato esconde las andanzas de cualquier ser humano. Esta historia, como casi todas, es también la mía. Lo amargo del asunto es que mi Caballero de los Espejos era bizco y algo más noble que Carrasco. A mi no me plantearon la trampa tan manifiestamente, tal vez porque en teoría yo no estaba loca."

Película/Canción: ante aunque pienso que sería un experimento cinematográfico interesante llevar este libro a la gran pantalla, aquí os dejo la presentación de No es tan fácil Morir.  Espero que os guste.


¡Un saludo y a seguir leyendo!

sábado, 16 de abril de 2016

EL RINCÓN DEL LECTOR: Clásicos inmortales.


¡Buenas tardes lectores/as! Una vez más, en la tradicional sección de este espacio, la ya conocida El Rincón del Lector, nos proponemos en esta ocasión a hablar de inmortales. Como ya sabéis, nos encontramos inmersos en conmemoraciones y actividades relacionadas con una serie de autores muy importantes para la historia de la literatura universal. Éste, es el año de grandes escritores como Miguel de Cervantes, William Shakespeare, Henry James y Jack London; por lo que en este espacio de critica y opinión no queríamos quedarnos atrás. Ya rendimos nuestro pequeño homenaje a Jack London en una de nuestras reseñas más recientes El Vagabundo de las Estrellas, y en esta ocasión, le ha llegado el turno a Miguel de Cervantes y al Quijote, el cual, será homenajeado en la próxima reseña que publiquemos. Pero para ir apaciguando las ganas, y porque se que es necesario hacerlo, os planteo la siguiente pregunta, relacionada precisamente con eso, con los inmortales. 

¿Para vosotros que características tendría que tener un libro para ser considerado un clásico de la literatura universal?


¡Un saludo y a seguir leyendo!

lunes, 11 de abril de 2016

RESEÑA: El Mago de Oz.

EL MAGO DE OZ

Título: El Mago de Oz. 

Autor: L. Frank Baum (1856-1919) fue un escritor estadounidense de libros para niños. Baum alcanzó el éxito comercial con su primer libro, Father Goose (1899), al que siguió un año después la aún más popular historia El Maravilloso mago de Oz (1900). Escribió otros 13 libros sobre la serie Oz, que se granjeó un gran número de lectores. Tras la muerte de Baum, Ruth Plumly Thompson, escritora y gran admiradora de la obra de Baum, continuó la serie en su honor. La obra de L. Frank Baum comprende otras 55 novelas variadas, 9 novelas más de literatura fantástica, 82 relatos cortos, más de 200 poemas y un número desconocido de guiones teatrales y cinematográficos. 



Editorial: Alianza Editorial.

Idioma: inglés. 

Traductor: Verónica Fernández-Muro. 

Sinopsis: la tan prolongada vigencia de esta obra ha transformado en clásico un cuento infantil que conserva todo su atractivo y frescura originales. Sugiere que este relato lleno de fantasía y humor que da cuenta de las peripecias de Dorothy y su perro Toto, del Espantapájaros, del Leñador de Hojalata y del León Cobarde en su camino hacia la Ciudad Esmeralda, donde esperan conseguir del Gran Oz la realización de sus deseos, alberga en su seno otras lecturas posibles que cada generación por su cuenta ha ido y seguirá descubriendo.  

Su lectura me ha parecido: agradable, tierna, ágil, entretenida, didáctica, magistral, original, preciosa, profunda...En definitiva, imprescindible. Se que muchas veces lo he comentado en este espacio, y la verdad, nunca me cansaré de repetirlo, pues, creo que es necesario recordarlo las veces que haga falta. Es absolutamente necesario, por el bien de la humanidad, pero sobretodo, por el bien de nuestra propia experiencia como personas con criterio y opinión, acercarnos a los clásicos. Ya sea a través de medios tradicionales, es decir, el papel impreso sobre la extensa hoja blanca, como por otras vías igualmente satisfactorias, como internet o los soportes electrónicos. Sea como sea, a gusto siempre del lector, debemos hacerlo, o por lo menos intentarlo, aunque sea una vez en la vida, no pido más. La razón de por qué este ejercicio es importante reside en el hecho de que ellos, los clásicos, siempre van a estar ahí, siempre, y da igual que pasen por ellos miles y miles de años, o de siglos incluso, pues, sus enseñanzas y su legado permanecerá intacto para que las generaciones venideras puedan disfrutar de todas aquellas historias inolvidables en todo su esplendor. El libro, aunque la palabra más adecuada para definirlo sería la de joya, que hoy tengo el placer de reseñar para vosotros, lectores y lectoras, es uno de esos escritos cuya trascendencia y vigor siguen suscitando opiniones, de todos los colores y matices variopintos, incluso a día de hoy. Lectores y lectoras, os presento y reseño El Mago de Oz: la metáfora más profunda disfrazada de ternura y amistad. 

La historia de como El Mago de Oz llegó a mis manos es de esas que recuerdas y que cada vez que lo rememoras, un halo de ligera nostalgia recorre tu semblante para a continuación efectuar una amplia sonrisa. Una servidora, como es lógico, ya había oído hablar del libro, pero sobretodo, de aquella mítica película del año 1939, la cual, todos alguna vez hemos visto. En mi caso, creo recordar que la vi por lo menos dos veces, y la continuación creo que también, sin embargo, de ésta última sólo conservo pequeños fragmentos en mi memoria. En resumidas cuentas, digamos que El Mago de Oz no era ni un libro y ni un producto cinematográfico y de merchandaising posteriormente, desconocido para mi. No obstante, me picó la curiosidad por leerme algún día este libro a raíz de una clase de Historia de Estados Unidos el año pasado, en la cual, la profesora nos comentó una cuestión relacionada con una de sus posibles interpretaciones en relación al contexto en el que apareció por primera vez. A esta tremenda inquietud se le añadió el hecho de que estaba descubriendo, a raíz de estas clases, que la historia de los Estados Unidos, cada vez, me iba resultando más atractiva, es más, acabó por gustarme, por lo que esas incipientes ganas de leer El Mago de Oz fueron a más con el paso del tiempo. Muchos meses más tarde, ya colaborando con el Grupo Anaya, y siendo consciente de que dicho grupo editorial publicaba éste libro, no lo dudé ni un segundo y acabé pidiéndoselo a la editorial. Mis impresiones y la conciencia de que estaba ante uno de esos libros irrepetibles, fue el excelente legado de su lectura. 


En lo que respecta la crítica propiamente dicha, es importante comenzar diciendo que El Mago de Oz presenta una lectura fácil, ágil, que tiende a recrearse en los puntos más importantes, como cuando Dorothy conoce a cada uno de los personajes, que luego serán sus amigos, los cuales, serán los que la acompañen a la Ciudad Esmeralda para ver al Gran Oz. Estas ligeras descripciones, son precisamente eso, ligeras, y la verdad, no dificultan para nada el seguimiento de la historia. Por otro lado, encontramos que El Mago de Oz es uno de esos libros, al menos eso me ha parecido, en los que el autor no ambienta la historia en un mundo imaginario en el que aterradores dragones, princesas empalagosas, príncipes azules o imponentes castillos aparecen continuamente. No, eso no es así, es más, lo que resulta especialmente interesante de todo esto es que dichos paisajes, incluso los que el autor inventa, nos recuerdan, y mucho, al paisaje de los Estados Unidos. Lugares como Kansas, es evidente que todo el mundo sabemos que es un estado muy conocido del país, no obstante, la Ciudad Esmeralda por ejemplo, recuerda vagamente, tal y como se presenta, a por un lado Nueva York, por su majestuosidad, fama y ostentación, y por otro lado a la capital del país, Washington, pues, es donde reside el gobierno de éste lugar inventado. Por otro lado, te habla de cuatro importantes puntos cardinales: el norte, el sur, el este y el oeste. Cada uno de ellos representado por una hada o una bruja dependiendo de donde ésta gobierne ¿No es esto mucha casualidad lectores y lectoras? Seguidamente, cabe mencionar que cada uno de los personajes, sobretodo en lo que respecta a El Espantapájaros, al Hombre de Hojalata, a El León Cobarde, y como no, a la Bruja mala del Oeste son únicos e icónicos en cierto sentido. Esto permite, gracias a la pluma de Baum, que hagamos nuestros estos personajes, en el sentido de que por ejemplo, nos riamos o sintamos ternura por los buenos y repulsión por los malos, algo que por otro lado no es original, ni mucho menos, pero si que ayuda y facilita que el lector empatice. Y por último, como suele pasar ante este tipo de escritos, deciros que no estamos ante un libro simple libro infantil, los libros se escriben por un motivo, siempre, eso es así, y en este caso, parece que El Mago de Oz deja atrás los clichés clásicos en los que se entremezcla la alegría inocente y esa moraleja que proporciona una terrible situación, Caperucita Roja sería el mejor ejemplo. Por todo ello, sólo queda preguntarnos cual es la verdadera moraleja de El Mago de Oz, de carácter tiene, o si por lo contrario, ésta no existiese. 


Adentrándonos en este último párrafo en la clásica reflexión, pues lectores y lectoras, todos los libros tienen la capacidad de proporcionárnosla, y si no, es que algo falla.  Me gustaría traer a este espacio un tema que ya hemos mencionado en el anterior párrafo y que sin duda, suscitará alguna que otra opinión. Hemos dicho que libros como El Mago de Oz, cuentos en apariencia dirigidos a un público infantil, esconden, si se leen con detenimiento y comprensión, algo más que una historieta más o menos buena salida de una mente privilegiada. Ese "algo más", tiene que ver con el hecho de que por ejemplo, algunas veces nos proporcionan una moraleja a la que se llega tras una situación macabra, el caso de Caperucita Roja, otras veces se nos representan realidades muy crueles, caso de la Cenicienta, o incluso casos extremadamente preocupantes, como Hansel y Gretel. Lo que pasa es que, con el paso de los años, se han ido creando versiones dulcificadas, las cuales han difuminado estos cuentos que no eran más que historias de terror, en las que vemos, y leemos con total naturalidad, como se abandonan a unos niños a su suerte, como se esclaviza o como tras un episodio digno de una película gore, se llega a la conclusión que no hay que hablar con desconocidos. Estas historias, a las que podríamos calificar de clásicas, juegan, como he mencionado antes, con la inocencia y las terribles consecuencias de ella, para arrojar al lector una sabia moraleja. En el caso de El Mago de Oz, la cosa cambia, existe por supuesto la lucha del bien contra el mal, y ese mal es muy perverso, sin embargo, Baum se deshace de la sangre, del terror y de la barbarie, convirtiéndola en algo que aunque es muy poderoso, el peso de lo correcto, es decir el bien, vence y lo hace con contundencia. Por otro lado, si que hay en El Mago de Oz una moraleja, pero fijaos, ésta tiene que ver con el contexto que le tocó vivir a Baum. pues, hay quien sostiene que este cuento es una alegoría directa a la lucha política y económica entre los que apostaban por el bimetalismo y los que apoyaban al patrón oro en ese Estados Unidos de finales del XIX. La carretera de ladrillos dorados representa la falsa promesa de oro, los zapatos el camino de vuelta a la racionalidad, Oz (onza) la medida de peso en oro y Kansas el estado agrícola endeudado y foco del socialismo estadounidense. Con este tema podríamos estar horas y horas divagando, incluso podríamos ver una interpretación feminista y otra social en lo que respecta la las brujas y hadas de los puntos cardinales, pero en resumen, lo que vengo a decir es que El Mago de Oz no esconde una moraleja social, sino política, que es muy distinto. Desde aquí os invito a que leáis el libro desde esta perspectiva, fijándoos bien, yo lo hice, y la verdad, la experiencia es totalmente recomendable. El Mago de Oz: una historia de aventuras, aprendizaje, miedos, fortalezas, decepciones, ambiciones, maldad...Un profundo ejercicio de maestría literaria. 

Frases o párrafos favoritos: 

"Extrae de tu interior todos los valores que buscas. Los valores están dentro de ti, sólo es preciso que fluyan." 

Película/Canción: de El Mago de Oz se han hecho infinidad de adaptaciones cinematográficas, desde la más importante e icónica, la del año 1939 donde vemos a una jovencisima Judy Garland interpretar honestamente a la pequeña Dorothy, hasta la de 2011, cuyo éxito en taquilla fue un fiasgo. De éste libro han salido además, continuaciones literarias y cinematográficas, un musical afamado, el interesante libro The Wicked y su posterior musical, un conocido grupo de folk-rock español, hasta productos como camisetas, libretas, sudaderas, pulseras...Se ha hablado mucho en los últimos meses de la posibilidad de llevar la vida de L. Farank Baum a la gran pantalla, se sabe que Eddie Redmayne (La Chica Danesa) interpretaría al autor y que el guión estaría en manos de un guionista novel, sin embargo, se desconoce por completo si el proyecto tendrá o no financiación. Hasta entonces, aquí os dejo con una de las escenas más famosas de aquella gloriosa adaptación de 1939, la cual, ha dejado imágenes para la historia del cine: 



¡Un saludo y a seguir el camino de baldosas amarillas!

Cortesía de Alianza Editorial (Grupo Anaya)


viernes, 8 de abril de 2016

SORTEO: LO QUE OCULTA EL SILENCIO.



¡Buenos días lectores y lectoras! Hoy en el blog estamos de enhorabuena, pues por primera vez (y espero que no sea la última) organizamos un concurso en el que, como premio, os podéis llevar un ejemplar de la novela Lo que oculta el Silencio de Elena Matrán Abascal, la cual, al igual que el resto de sus novelas, hemos reseñado en este espacio. Las normas para participar son las siguientes: 

BASES Y CONDICIONES: 

1- El sorteo es de carácter nacional (territorio español). 

2- Los que queráis participar debéis comentar la entrada adjuntando vuestro correo electrónico (para agilizar los trámites una vez conozcamos al ganador/a). 

3- Seguir el blog.

4-Seguir la página de Facebook "Jimena de la Almena escritora". 

5- Compartir el concurso creando una entrada especial en vuestro blog, o en su defecto, en las redes sociales (Facebook preferentemente). En el caso de los blogs, en la entrada debe aparecer la imagen oficial del concurso y adjuntar el enlace de la reseña de Lo que oculta el Silencio que publicamos en este espacio. El enlace es el siguiente:http://jimenadelaalmena.blogspot.com.es/2015/12/resena-lo-que-oculta-el-silencio.html

6- El plazo de participación se cerrará el 8 de mayo de 2016, todo mensaje que llegue después de esa fecha será automáticamente eliminado y no podrá participar en el concurso. 

7-En función del número de participantes que opten al premio, se determinará el funcionamiento del mismo, el cual seguramente se efectuará de una forma más manual. La forma en la que se elegirá al ganador se comunicará en una entrada informativa que se publicará un día después del cierre del concurso. 

8-El veredicto y resolución del concurso se efectuará el 15 de Mayo de 2016, el nombre del ganador se publicará en una entrada especial, además, por si el afortunado no se enterase de la resolución, se le mandaría un mensaje a su correo electrónico. Una vez desvelado el nombre, se entablarían conversaciones y procederá al envío del libro. 

9-La participación en este concurso supone el cumplimiento absoluto de las bases, se descalificará a quién no cumpla con los requisitos. 

Estas son las normas del concurso, espero que os animéis a participar. 

¡Un saludo, a seguir leyendo!

martes, 5 de abril de 2016

RESEÑA: Reencuentro.

REENCUENTRO

Título: Reencuentro. 

Autor: Margaret Deland (1857-1945), reconocida y afamada novelista, cuentista y poetisa norteamericana. Es recordada por su célebre novela John Ward, Preacher (1888) y sus encantadoras historias sobre la pequeña aldea rural de Old Chester basadas en sus primeros cuentos de Maple Grove y Manchester, en Pensilvania. Su obra a menudo es comparada a la de Elizabeth Gaskell. 


Editorial: dÉpoca. 

Idioma: inglés. 

Traducción: Rosa Sahuquillo Moreno. 

Sinopsis: la señorita Mary North llega al encantador pueblecito de Old Chester con el firme propósito de encontrar una casa en la que vivir junto a su madre, la señora North, quien anhela volver al que fue su hogar durante su infancia y adolescencia con el fin de pasar allí el resto de sus días. Quiere el destino que Mary, ante la sorpresa de sus nuevos vecinos, se decida por una vivienda en Main Street, justo enfrente de la vieja casa de los Pirce. Y es entonces cuando Old Chester empieza a bullir de excitación: murmuraciones contenidas, risas nerviosas, insinuaciones y muchas preguntas en el aire. ¿Sabe Mary quiénes son sus vecinos? ¿Conoce acaso lo que ocurrió cuarenta y ocho años atrás? ¿Le habrá contado su madre quien es Alfred Price?

Su lectura me ha parecido: condensada, sutil, evocadora, rápida, pausada, ligera, tierna, reflexiva en algunos aspectos, tímida en cierto sentido...Queridos lectores y lectoras, muchos de vosotros sabréis que en Jimena de la Almena trato, además de reseñar lo más fielmente posible todos los libros que de una forma u otra van cayendo en mis manos, también de acercaros los grandes clásicos de la literatura universal. No obstante, os confesaré que, al igual que la protagonista de 84, Charing Cross Road, me encanta de vez en cuando, toparme, aunque sea por casualidad, con una lectura menos convencional, algo que en cierto sentido puede llevarnos a la confusión. Me explico, una lectura poco convencional no quiere decir que ésta sea rara o cuya narración sea diferente, que las hay y a puñados, en este caso, cuando digo poco convencional me refiero al hecho de que libros como el que hoy tengo el placer de reseñar, no se suelen encontrar fácilmente, o bien porque éste ha sucumbido a obras más importantes del mismo autor que lo escribió o porque en el mundo editorial prima más lo conocido por el gran público que lo desconocido por éste. En fin, ya sea de un modo u otro, la cuestión es que debemos, y eso lo digo muy sinceramente, bucear hacia el fondo, más allá de lo que conocemos y de lo que nos han enseñado, puede que como en esta excepcional ocasión, nos encontremos con verdaderas y hermosas perlas, a las cuales, hay que sacar de vez en cuando brillo. Una vez dicho esto y sin extenderme más de lo necesario os traigo la reseña de Reencuentro: un ligero pero interesante extracto de la vida social de un tiempo irrepetible. 

La historia de como llegó éste libro a mis manos es de las más corrientes del mundo. Una servidora andaba distraída, paseando, por una de las tantas concurridas librerías del centro de mi ciudad, y mis ojos no encontraban nada interesante a la vista a priori. Todo, en su mayoría por decirlo de alguna manera, eran novelas actuales, las cuales, muchas de ellas acababan de publicarse seguro. Con esto no quiero decir que no estuviesen bien, es más, lo ignoro completamente, solamente es que en aquellos momentos, me parecieron todas iguales, cortadas por el mismo patrón narrativo. Supongo que estaba en un plan extraño. De todas formas, esa visión tan sesgada injustamente, lo reconozco, me aportó algo positivo, pues, de repente, mis ojos se toparon con Reencuentro. La verdad es que no recuerdo exactamente lo que sentí, supongo que admiración, pues el diseño ligeramente vintage de su portada me dejó seguramente impactada. No obstante, y tras comprobar la belleza de su sinopsis, decidí mentalmente, que aquel no era un libro para dejarlo escapar a la primera de cambio. Al finalizar su lectura, éste, Reencuentro, no ha logrado colarse entre mis imprescindibles, sin embargo, se ha convertido en una lectura de cabecera para otras cuestiones ajenas al estilo literario.  


En lo que respecta a la crítica propiamente dicha, comenzaré diciendo que Reencuentro presenta una lectura ligera y activa, es más, se puede leer en una sola tarde, lo cual es un buen indicativo de cara a que el lector acabe sucumbiendo a sus páginas, sin embargo, y ya esto es una opinión puramente personal, creo que esta demasiado condensada y estructurada, un aspecto que también puede ser positivo, pero que para una servidora, considera que limita mucho la trama. Es como si la propia Deland tuviese claro desde el principio que ésta se iba a tratar de una novela corta. Me cuesta, creerme, opinar sobre estos aspectos, sobretodo tratándose de una novela que se puede considerar clásica por muchos motivos a pesar de que no sea muy conocida por el gran público, no obstante, creo que es importante que el futuro lector que quiera adentrarse en esta novela lo tenga muy en cuenta. Por otro lado, y dejando un poco de lado los aspectos puramente estilísticos, Reencuentro se compone de una descripción argumental y psicológica interesante, que bebe de estilos anteriores pero que presenta una forma muy personal, la cual se desenvuelve con mucha naturalidad. Hay una pluma muy segura detrás de Reencuentro, y eso se nota. Seguidamente, y aunque resulte una historia muy previsible hasta cierto punto, esta pequeña novela presenta una trama realista, me explico, en en el sentido de que ésta, por muy extraordinaria que sea, se puede dar, es más, seguro que sucede hasta en la actualidad. Esto es un punto muy interesante dentro del cuerpo de la novela, pues, nos puede llevar a realizar reflexiones bastante pertinentes al respecto, una de las cuales, desarrollaremos a continuación. Finalmente, sólo cabe apuntar que en Reencuentro, para quien esté interesado, se pueden apreciar a la perfección los diferentes roles de género de la época, y la opinión de cada uno de ellos con respecto al momento en el que el libro fue escrito, algo que no deja de ser realmente revelador e interesante al mismo tiempo. 


Adentrándonos en este punto, en el que tradicionalmente destacamos esa pequeña, pero importante, reflexión que dejan todas las novelas que se someten a la atenta mirada de quién vela por este espacio de debate, crítica y opinión; Reencuentro no iba a librarse obviamente de esta especie de criba intelectual. Como ya he apuntado en el anterior párrafo, Reencuentro ofrece, por su narración y personajes, una oportuna reflexión que, incluso a día de hoy tiene cabida. Reencuentro, habla de pasión, de sentimientos, de momentos vividos en el pasado, que años más tarde, muchos años más tarde, ya en el ocaso de la vida, en el fin biológico de todo ser humano, vuelven a aparecer por casualidad, arrollando la vida de quienes experimentaron dichos recuerdos, pero también, la de los que presenciaron esa pequeña historia o anécdota en ese pequeño pueblo de Old Chester, dando lugar, a que, cuando ese "reencuentro" se produce, a chismorreos y a que la historia vuelva a tener vigencia tantos años después. Esto, quien viva o tenga un pueblo de veraneo, por decirlo de alguna forma, conocerá el fenómeno bastante bien. ¿Quién no ha visto en los pueblos a ese grupo, de ancianas en su mayoría, cuchichear sobre el o la que ha pasado delante de sus narices a plena luz del día? ¿Quién no tiene, si vive o es descendiente de una persona que ha vivido en un pueblo, esa especie de apodo divertido o no que caracteriza o sirve para nombrar a un grupo familiar determinado? Con todo esto quiero decir, lectores y lectoras, que en lugares tan pequeños, como es el caso de Old Chester, lugar donde se desarrolla la trama de Reencuentro, el pasado es muy importante, algo que se explica si tenemos en cuenta que en estos lugares la tradición, la reputación y las convenciones sociales han tenido un valor muy significativo. Cualquier mancha puede determinar la visión de un grupo familiar entero por los siglos de los siglos, algo que por otro lado, ocurre en las redes sociales actuales, convirtiéndose en este sentido, en el nuevo y masivo lugar donde el cotilleo, los rumores y el peso del pasado, sobretodo eso último, reflejado en instantáneas que muchos desearíamos borrar, se han convertido en elementos imprescindibles. Actualmente, existen páginas que te ofrecen deshacerte de esas fotos comprometidas o que simplemente no deseemos poseer, sin embargo, y acercándonos al terreno oral, hay cosas que no pueden desaparecer tan fácilmente, los entresijos de la mente y el comportamiento humano al fin y al cabo, distan mucho de lo que un ordenador nos pueda ofrecer a golpe de tecla. Reencuentro: una historia de amor, de sentimientos, de pasiones, de rumores, de cotilleos, de viejas historias, de explicaciones...Una novela llena de pequeños "reencuentros" que nadie debería perderse. 

Párrafos o frases favoritas: 

"En cuanto a sus modales, Old Chester estaba dividido. La señora de David Bailey afirmaba, con delicado disgusto, que eran pésimos. Por el contrario, la señora Barkley argumentaba que el problema radicaba precisamente en que carecía por completo de los mismos. Y en cuanto al doctor Lavendar, se aferraba a la idea de que la dama no era mas que tímida. Pero como decía la señora Drayton, eso era muy propio del doctor Lavendar ¡Siempre excusando las faltas!"

Película/Canción: a la espera de que se produzca, he decidido concluir la reseña con una pieza muy evocadora, la cual, se me venía a la cabeza cada vez que me adentraba en las páginas de Reencuentro. Espero que la disfrutéis: 



¡Un saludo y a seguir leyendo!

viernes, 1 de abril de 2016

PREMIO: The Versatile Blogger Award.

THE VERSATILE BLOGGER AWARD
¡Buenas tardes lectores/as! Hoy en el blog estamos de enhorabuena, pues, después de mucho tiempo, volvemos a recibir una nominación a un premio de difusión. En esta ocasión se trata del The Versatile Blogger Award y Esther Pascual, administradora del blog El misterioso desvan ha sido la persona en avisarme de tan buena noticia. En esta ocasión, he dedicido nominar la blogs que hace poco que acabo de descubir para que todos vosotros os paséis por ellos, algunos tienen muy pocos seguidores, pero aún así, resultan realmente prometedores. Bueno, sin más dilación he aquí las normas: 

LAS REGLAS SON: 

1. Adjuntar el banner al blog.
2. Contar 7 cosas sobre ti.
3. Nominar a 15 blogs que conozcas o acabes de conocer y avisarles. 


7 COSAS DE MI: 

1. Soy graduada en Historia. 
2. Me encantan los libros que me hagan pensar. 
3. Me gustaría dedicarme a la escritura. 
4. Adoro los días lluviosos. 
5. Suelo leer de noche y con poca luz. 
6. Siempre llevo una libreta de notas a todas partes. 
7. Una de mis etapas favoritas de la historia son los felices años 20. 

15 BLOGS A LOS QUE NOMINO: 



¡Un saludo y enhorabuena a los nominados!