ROSA CÁNDIDA
Título: Rosa Candida.
Autor: Adur Ava Ólafsdóttir (1958) escritora islandesa, profesora de Historia del Arte en la universidad de Rekiavik y directora del Museo de la Universidad de Islandia. Entre sus obras más conocidas encontramos Rosa Cándida, La mujer es una Isla y La excepción; obras que le han valido importantes reconocimientos en el terreno literario, tales como el Premio Literario de la ciudad de Rekiavik o el Premio Page des Libraires.
Editorial: Alfaguara.
Idioma: islandés.
Traductor: Enrique Bernádez.
Sinopsis: el joven Arnljótur decide abandonar su cada, a su hermano gemelo autista, a su padre octogenario y los países crepusculares de montañas de lavas cubiertas de líquenes. Su madre acaba de tener un accidente y, al borde de la muerte, aún reúne fuerzas para llamar a su hijo y darle unos últimos consejos. Un fuerte lazo les une: el jardín y el invernadero donde ella cultivaba una extraña variedad de rosa: la rosa candida, de ocho pétalos. Es en ese mismo invernadero donde una noche, imprevisiblemente, Arnljótur había amado a Anna, una amiga de un amigo.
Su lectura me ha parecido: tierna, penetrante, adictiva, original, exótica, emocionante, transversal, contundente, inspiradora, maravillosa...Queridos lectores y lectoras, estamos ante un momento especial, pues, una servidora tenía muchas ganas de que por fin, llegase este ansiado momento. Muy pocas veces, por no decir que éstas se pueden contar con los dedos de las dos manos, me he encontrado ante lecturas únicas, intensas, que sepan acercarse al lector, con abrumador sigilo, para después, penetrar con brutalidad en su subconsciente, provocando una serie de reacciones físicas y químicas muy favorables para la estimulación de emociones y facultades que creíamos olvidadas. Tras una interminable lista de lecturas poco enriquecedoras para mi gusto, de pronto, éste libro se coló en mi vida de una forma totalmente inesperada, cuyo impacto fue tal que aún a día de hoy, recuerdo su el ancho de su forma, el áspero tacto de sus hojas, el armonioso sonido de sus palabras, la interesante introspección de sus personajes, de lugares por los que mi imaginación todavía no había tenido el placer de pasear tranquilamente...En definitiva, uno de esos libros que llegan a lo más profundo, una de esas lecturas que marcan de por vida . Rosa Candida: la belleza y el drama unidos en un paisaje inmejorable.
La historia de como Rosa Candida llegó a mis manos fue de lo más corriente, sin embargo, esa es una de tantas historias que no puedes olvidar. La primera vez que mis curiosos ojos oscuros se toparon con Rosa Candida fue en la pequeña biblioteca de mi barrio, como tantas y tantas veces me ha sucedido con otras lecturas, más afortunadas o menos, que han desfilado por las entradas de este espacio. Recuerdo, que como tantas otras veces, lo primero que llamó poderosamente mi atención fue el exquisito diseño de portada que éste título en cuestión presentaba. Cualquiera que me conozca un poco a fondo sabrá que me encantan los estampados florales, de hecho, no son pocas las prendas de ropa que atesoro con estos diseño, y como no, mis ojos parecen centellar cuando de pronto, una se topa con una portada con motivos florales, y encima, con un título realmente enigmático. Recuerdo que aquella primera vez, ojeé rápidamente la sinopsis del libro, sin embargo y no se por qué razón, no llegué a llevármelo finalmente a casa prestado. Ahora mismo lo pienso y la verdad, todavía no he logrado averiguar el por qué de dicha estupidez, pues, semanas más tarde, una servidora si que accedió a llevárselo a casa, para ser degustado críticamente cada noche, cada día, bajo la tenue luz de la lamparita o en los lugares más inhospitados que os podáis imaginar. Tras tan memorable experiencia, cada vez que me topo de nuevo con un ejemplar de Rosa Candida en cualquier librería de mi ciudad, sonrío, respiro hondo y las experiencias vividas vuelven de nuevo a mi cabeza en forma de un buen y valioso recuerdo.
En lo que respecta al comentario de la novela, comenzaremos diciendo que Rosa Candida presenta una estructura y un estilo narrativo muy concretos y certeros al mismo tiempo, una estructura tradicional en apariencia, pero acompañada de un estilo muy personal y logrado gracias a esa introspección sentimental y afectiva que la autora establece con todos y cada uno de los personajes, llegando incluso hasta el más pequeño de ellos, sin dejarse cabos sueltos. De este modo, el lector se puede poner en el lugar de todos, y lo que es mejor aún, llegar incluso a rozarles la piel y poder experimentar sus frustraciones, satisfacciones o desgarros emocionales que experimentan a lo largo de la novela. Seguidamente, es importante comentar que nos encontramos ante una especie de novela inicática, de autoaprendizaje y de valoración de las pequeñas cosas que proporcionan la felicidad. ésto se logra a través de un recurso súper explotado a lo largo de la literatura como es el de un viaje, un viaje hacia lo que uno desea en un principio pero que después se torna diferente, pero incluso más enriquecedor y satisfactorio para Arnljótur, protagonista de esta inolvidable novela. Este aspecto tan importante y que se constituye como el eje principal de la trama resulta bastante típico por un lado, pero al darle la vuelta, la autora consigue crear giros, que aunque no demasiado evidentes, si importantes para que el lector acabe sucumbiendo a la historia que se narra. Por otro lado, no debemos pasar por alto que Rosa Candida es una novela dramática, es más, la autora juega con ese dramatismo, suavizándolo en muchas ocasiones, para que no sea demasiado abrumador a ojos de lector, y elevándolo de tono en las ocasiones más acertadas, creando de este modo un equilibrio emocional muy intenso, representado por los dilemas de Arnljótur, por ese recuerdo de la madre fallecida inesperadamente y lo que poco a poco le va sucediendo en ese proceso de realización personal de carácter casi místico, rodeado de rosas candidas. Por último, comentar que Rosa Candida, y esto es sin duda lo que más me ha gustado, es un bello pero necesario canto a la paternidad, pero sobretodo, al descubrimiento y a la paulatina asimilación de la misma. De hecho, me imagino que de forma intencionada, los pasajes en los que se aborda este tema son los más interesantes y emotivos de todo el libro, supongo que esto es debido a una intención por parte de la autora de remover conciencias para la proliferación de nuevos valores en la literatura actual.
En este último párrafo, destinado a la tradicional reflexión de todas las semanas, me gustaría hablar de un tema que ya ha salido en más de una ocasión en este espacio dedicado a la critica y la opinión, pero que historias como Rosa Cándida nos recuerdan que es importante hablar de él. Tradicionalmente, o más bien la palabra más adecuada para comenzar sería "habitualmente", el lector de toda la vida, el de siempre, se siente atraído por una serie determinada de lecturas, dependiendo claro está de sus gustos literarios en este sentido. Sin embargo, y eso es lo más preocupante, el lector en general, está acostumbrado a leer literatura, buena o mala, procedente de una serie de países que casi siempre se repiten si le preguntas a otras persona por sus lecturas habituales. Estos países, son normalmente los de la órbita anglosajona (sobretodo Inglaterra y Estados Unidos), la órbita francesa, la sudamericana (y sólo leemos a los clásicos), la alemana, la italiana ocasionalmente y España en nuestro caso. Esto amigos y amigas, es debido a la gran tradición que ha habido a lo largo de la historia de la literatura por las novelas clásicas europeas, y después por el boom mediático que se les ha proporcionado a través de los medios de comunicación. Sin embargo, pienso que todos y todas debemos abrir un poco nuestro horizonte de lecturas y atrevernos a descubrir otras literaturas igual o mejor trabajadas en otros lugares del globo terráqueo. Para una servidora, es una alegría ver como hubo una breve pero intensa época en la que se puso de moda la novela negra nórdica, las novelas de Murakami, las de Petros Markáris o que actualmente la literatura procedente de países como Marruecos, Australia, Turquía, Ucrania o Finlandia entre otros está despertando notablemente, produciendo novelas increíbles y muy recomendables para el público. Con todo esto no quiero deciros que no os leáis la última novela de el último autor britanico-americano, sino que exploremos nuevas tierras, algunas tan lejanas que incluso puede resultar un buen ejercicio de cara a estimular nuestra imaginación. Rosa Cándida: una historia de amor, búsqueda, sacrificio, recuerdos imborrables, jardinería, reflexiones, dilemas....Una novela que me ha descubierto a una autora excepcional, cuyas novelas no pueden esperar eternamente para satisfacer a una lectora empedernida.
Frases o párrafos favoritos:
"Uno no puede saber lo que siente sobre cualquier cosa cuando ésta no ha hecho más que producirse."
Película/Canción: como no hay noticias de una posible adaptación cinematográfica, una servidora os adjunta el Primer Concierto de Brandemburgo de J. S Bach, una melodía que se me venía a la Cabeza cada vez que me adentraba en las páginas de Rosa Candida. Espero que lo disfrutéis:
¡Un saludo y a seguir leyendo!
Su lectura me ha parecido: tierna, penetrante, adictiva, original, exótica, emocionante, transversal, contundente, inspiradora, maravillosa...Queridos lectores y lectoras, estamos ante un momento especial, pues, una servidora tenía muchas ganas de que por fin, llegase este ansiado momento. Muy pocas veces, por no decir que éstas se pueden contar con los dedos de las dos manos, me he encontrado ante lecturas únicas, intensas, que sepan acercarse al lector, con abrumador sigilo, para después, penetrar con brutalidad en su subconsciente, provocando una serie de reacciones físicas y químicas muy favorables para la estimulación de emociones y facultades que creíamos olvidadas. Tras una interminable lista de lecturas poco enriquecedoras para mi gusto, de pronto, éste libro se coló en mi vida de una forma totalmente inesperada, cuyo impacto fue tal que aún a día de hoy, recuerdo su el ancho de su forma, el áspero tacto de sus hojas, el armonioso sonido de sus palabras, la interesante introspección de sus personajes, de lugares por los que mi imaginación todavía no había tenido el placer de pasear tranquilamente...En definitiva, uno de esos libros que llegan a lo más profundo, una de esas lecturas que marcan de por vida . Rosa Candida: la belleza y el drama unidos en un paisaje inmejorable.
La historia de como Rosa Candida llegó a mis manos fue de lo más corriente, sin embargo, esa es una de tantas historias que no puedes olvidar. La primera vez que mis curiosos ojos oscuros se toparon con Rosa Candida fue en la pequeña biblioteca de mi barrio, como tantas y tantas veces me ha sucedido con otras lecturas, más afortunadas o menos, que han desfilado por las entradas de este espacio. Recuerdo, que como tantas otras veces, lo primero que llamó poderosamente mi atención fue el exquisito diseño de portada que éste título en cuestión presentaba. Cualquiera que me conozca un poco a fondo sabrá que me encantan los estampados florales, de hecho, no son pocas las prendas de ropa que atesoro con estos diseño, y como no, mis ojos parecen centellar cuando de pronto, una se topa con una portada con motivos florales, y encima, con un título realmente enigmático. Recuerdo que aquella primera vez, ojeé rápidamente la sinopsis del libro, sin embargo y no se por qué razón, no llegué a llevármelo finalmente a casa prestado. Ahora mismo lo pienso y la verdad, todavía no he logrado averiguar el por qué de dicha estupidez, pues, semanas más tarde, una servidora si que accedió a llevárselo a casa, para ser degustado críticamente cada noche, cada día, bajo la tenue luz de la lamparita o en los lugares más inhospitados que os podáis imaginar. Tras tan memorable experiencia, cada vez que me topo de nuevo con un ejemplar de Rosa Candida en cualquier librería de mi ciudad, sonrío, respiro hondo y las experiencias vividas vuelven de nuevo a mi cabeza en forma de un buen y valioso recuerdo.
En lo que respecta al comentario de la novela, comenzaremos diciendo que Rosa Candida presenta una estructura y un estilo narrativo muy concretos y certeros al mismo tiempo, una estructura tradicional en apariencia, pero acompañada de un estilo muy personal y logrado gracias a esa introspección sentimental y afectiva que la autora establece con todos y cada uno de los personajes, llegando incluso hasta el más pequeño de ellos, sin dejarse cabos sueltos. De este modo, el lector se puede poner en el lugar de todos, y lo que es mejor aún, llegar incluso a rozarles la piel y poder experimentar sus frustraciones, satisfacciones o desgarros emocionales que experimentan a lo largo de la novela. Seguidamente, es importante comentar que nos encontramos ante una especie de novela inicática, de autoaprendizaje y de valoración de las pequeñas cosas que proporcionan la felicidad. ésto se logra a través de un recurso súper explotado a lo largo de la literatura como es el de un viaje, un viaje hacia lo que uno desea en un principio pero que después se torna diferente, pero incluso más enriquecedor y satisfactorio para Arnljótur, protagonista de esta inolvidable novela. Este aspecto tan importante y que se constituye como el eje principal de la trama resulta bastante típico por un lado, pero al darle la vuelta, la autora consigue crear giros, que aunque no demasiado evidentes, si importantes para que el lector acabe sucumbiendo a la historia que se narra. Por otro lado, no debemos pasar por alto que Rosa Candida es una novela dramática, es más, la autora juega con ese dramatismo, suavizándolo en muchas ocasiones, para que no sea demasiado abrumador a ojos de lector, y elevándolo de tono en las ocasiones más acertadas, creando de este modo un equilibrio emocional muy intenso, representado por los dilemas de Arnljótur, por ese recuerdo de la madre fallecida inesperadamente y lo que poco a poco le va sucediendo en ese proceso de realización personal de carácter casi místico, rodeado de rosas candidas. Por último, comentar que Rosa Candida, y esto es sin duda lo que más me ha gustado, es un bello pero necesario canto a la paternidad, pero sobretodo, al descubrimiento y a la paulatina asimilación de la misma. De hecho, me imagino que de forma intencionada, los pasajes en los que se aborda este tema son los más interesantes y emotivos de todo el libro, supongo que esto es debido a una intención por parte de la autora de remover conciencias para la proliferación de nuevos valores en la literatura actual.
En este último párrafo, destinado a la tradicional reflexión de todas las semanas, me gustaría hablar de un tema que ya ha salido en más de una ocasión en este espacio dedicado a la critica y la opinión, pero que historias como Rosa Cándida nos recuerdan que es importante hablar de él. Tradicionalmente, o más bien la palabra más adecuada para comenzar sería "habitualmente", el lector de toda la vida, el de siempre, se siente atraído por una serie determinada de lecturas, dependiendo claro está de sus gustos literarios en este sentido. Sin embargo, y eso es lo más preocupante, el lector en general, está acostumbrado a leer literatura, buena o mala, procedente de una serie de países que casi siempre se repiten si le preguntas a otras persona por sus lecturas habituales. Estos países, son normalmente los de la órbita anglosajona (sobretodo Inglaterra y Estados Unidos), la órbita francesa, la sudamericana (y sólo leemos a los clásicos), la alemana, la italiana ocasionalmente y España en nuestro caso. Esto amigos y amigas, es debido a la gran tradición que ha habido a lo largo de la historia de la literatura por las novelas clásicas europeas, y después por el boom mediático que se les ha proporcionado a través de los medios de comunicación. Sin embargo, pienso que todos y todas debemos abrir un poco nuestro horizonte de lecturas y atrevernos a descubrir otras literaturas igual o mejor trabajadas en otros lugares del globo terráqueo. Para una servidora, es una alegría ver como hubo una breve pero intensa época en la que se puso de moda la novela negra nórdica, las novelas de Murakami, las de Petros Markáris o que actualmente la literatura procedente de países como Marruecos, Australia, Turquía, Ucrania o Finlandia entre otros está despertando notablemente, produciendo novelas increíbles y muy recomendables para el público. Con todo esto no quiero deciros que no os leáis la última novela de el último autor britanico-americano, sino que exploremos nuevas tierras, algunas tan lejanas que incluso puede resultar un buen ejercicio de cara a estimular nuestra imaginación. Rosa Cándida: una historia de amor, búsqueda, sacrificio, recuerdos imborrables, jardinería, reflexiones, dilemas....Una novela que me ha descubierto a una autora excepcional, cuyas novelas no pueden esperar eternamente para satisfacer a una lectora empedernida.
Frases o párrafos favoritos:
"Uno no puede saber lo que siente sobre cualquier cosa cuando ésta no ha hecho más que producirse."
Película/Canción: como no hay noticias de una posible adaptación cinematográfica, una servidora os adjunta el Primer Concierto de Brandemburgo de J. S Bach, una melodía que se me venía a la Cabeza cada vez que me adentraba en las páginas de Rosa Candida. Espero que lo disfrutéis:
¡Un saludo y a seguir leyendo!